El fiscal regional interventor Matías Merlo conformó un nuevo equipo con los fiscales José Luis Caterina, Marisol Fabbro y María de los Ángeles Granato. Son los que van a decidir si imputan o no al senador Armando Traferri. Sin Edery, hasta Schiappa Pietra está virtualmente afuera de la causa: es “asesor”, sin posibilidad intervención en la investigación o audiencias.

El Ministerio Público de la Acusación conformó el nuevo equipo de fiscales a partir de las denuncias penales y planteos de defensores fundados en el caso Edery, que recientemente fue sancionado con 4 meses de suspensión. Allí, Schiappa Pietra fue notificado pero no imputado.

Con la nueva conformación, se terminó la “formación” de funcionarios que inició la causa y llevó adelante audiencias y hasta condenas, que es la que en su momento llegaron a integrar María Eugenia Iribarren y Gisela Paolicelli.

De aquél grupo de cuatro fiscales, Gisela Paolicelli es la única al margen de la causa penal o de los procesos administrativos derivados del Caso Ortigala. Tras el inicio de la investigación por juego ilegal, había sido designada a la Unidad de Homicidios del MPA -donde continúa- y no intervino más.

¿Puede el nuevo equipo imputar a Traferri? 

Si los fiscales que quedaron a cargo de la causa lo consideran, sí, porque el senador renunció a sus fueros. Presentarán un informe en las próximas semanas. La acusación original era como jefe de asociación ilícita y otros delitos.

Con información de Hernán Funes.