El proceso judicial entre Blake Lively y Justin Baldoni se centra en denuncias de acoso sexual que surgieron durante la filmación de la película Romper el círculo. Este caso ha tomado notoriedad debido a la posible implicación de Taylor Swift, amiga cercana de Lively, ya que Baldoni solicitó su testimonio argumentando que podría poseer información relevante. Sin embargo, la cantante no llegó a ser convocada de manera formal.

Los representantes de Swift argumentaron que la información que proporcionaron fue facilitada de forma directa y sin coerción, lo que llevó a los abogados de Baldoni a retirar su solicitud para que la artista testificara. Según se informó, fue Scott Swift, el padre de Taylor, quien ofreció su declaración de manera voluntaria y facilitó la situación.

En medio de estos acontecimientos, los representantes de Lively acusaron a Baldoni de intentar manipular la situación utilizando el nombre de Swift para atraer la atención de los medios. Se alegó que los abogados del actor intentaron presionar a la cantante para que brindara su apoyo público a Lively en esta disputa, amenazándola incluso con divulgar mensajes privados si no cumplía con sus demandas.

Las acusaciones de Lively contra Baldoni fueron inicialmente desestimadas por un juez, quien también llamó la atención sobre la presentación de alegaciones no corroboradas en los documentos judiciales por parte de los letrados del actor. Aunque Swift no se ha manifestado públicamente sobre el asunto, se conoció que su deseo es mantenerse alejada de la disputa que enfrenta a sus dos conocidos.

El juicio está programado para marzo de 2026 en Nueva York, y se espera que atraiga mayor atención mediática dada la naturaleza de las acusaciones y la participación de figuras públicas.