Encontraron huesos humanos en la casa de Avenida Congreso al 3700, donde residieron, entre otros, el músico Gustavo Cerati y la artista Hilda Lizarazu, ubicada en el barrio porteño de Coghlan.
El impactante descubrimiento ocurrió durante las labores de demolición tras la venta del inmueble.
El periodista Julián Padilla reveló que, durante las obras, un muro colapsó y los restos quedaron expuestos. Inmediatamente, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y la fiscalía, liderada por Martín López Perrando, intervinieron en la escena, esperando realizar estudios forenses que determinen la fecha y origen de estos restos, además de hallar objetos personales como relojes.
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Sociedad Todo ocurrió en un galpón ubicado en el fondo de la vivienda. La Justicia realiza una investigación para esclarecer las causas del deceso y determinar la identidad de la víctima.
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Desde que la Policía determinó que los restos eran humanos, la propiedad se convirtió en un foco de investigación. Mantienen varias hipótesis abiertas, desde un entierro histórico hasta supuestas irregularidades durante su etapa como geriátrico. Sin conexión aparente con la vivencia de Cerati, el hallazgo ha reavivado el interés por el pasado oculto del lugar.
Marina Olmi, quien adquirió la propiedad hace 30 años junto a su exmarido, compartió en diálogo con Padilla que el inmueble ya presentaba un estado deteriorado en el momento de la compra.