El pasado viernes, Wanda Nara se vio envuelta en un tumultuoso episodio cuando Mauro Icardi llegó al Chateau Libertador con la intención de retirar a sus hijas. Las abogadas de Icardi, Lara Piro y Elba Marcovecchio, decidieron elevar una denuncia formal tanto en el ámbito civil como en el penal.

Según trascendió en Puro Show, el contenido de la denuncia indica que "la señora Nara se dedicó a realizar una transmisión de su versión a los medios, mientras sus hijas, en estado de angustia, lloraban, y ella se ocupaba de hacerse las manos".

El escrito también menciona que "el Ministerio Público Tutelar le ofreció diversas alternativas, pero, a medida que avanzaba el tiempo, la señora Nara optó por alertar a la policía de violencia de género, a pesar de que Icardi permanecía en la cochera". Se dio a entender que Wanda intentó nuevamente acusar a Icardi de violencia de género, aunque el futbolista no se acercó al departamento en cuestión.

"La madre tenía a las niñas como rehenes; fue una escena demencial, digna de una toma de rehenes, que debe ser penada. Nara maltrató a sus propias hijas," expresaron las abogadas en su denuncia.

Además, se anunció que las letradas solicitarían la tenencia de las menores al juez lo más pronto posible, dado que Icardi tiene previsto regresar a Turquía el 5 de julio para retomar sus actividades con el Galatasaray.