Halle Berry y Olivier Martínez se separaron hace un año y pactaron la tenencia compartida de Maceo, el hijo de 10 años que tienen en común.

Cuando firmaron los papeles de divorcio acordaron que ambos se someterían a terapia para una crianza más responsable del niño. Los problemas se iniciaron cuando Olivier se acostumbró a faltar por las razones màs diversas.

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 En los documentos judiciales publicados recientemente por la web  TMZ, la  actriz acusaba a su exmarido de intentar retrasar las sesiones de terapia a las que acordaron acudir para solucionar sus diferencias y así ejercer en buenos términos la custodia compartida de su único hijo. 

Ella pretendía que un juez lo obligara a cumplir con el cronograma establecido en su acuerdo, que incluye las sesiones de terapia y otros requisitos. Pero finalmente su petición  fue denegada este  en las últimas horas.

La justicia desoyó los reclamos de Halle Berry para que actuara sobre su ex marido y lo forzara a concurrir  puntualmente a las sesiones de terapia comprometidad.

El equipo legal de Berry argumentaba que la ausencia de Martinez está “frustrando todo el proceso terapéutico” y obstaculizando el “desarrollo y los mejores intereses” de su hijo.

Según el planteo que los abogados de  la actriz  hicieron en tribunales, su marido deseaba retrasar las sesiones para poder “tomarse el verano libre”, sin aclararlo siquiera con ella o con su terapeuta. 

También afirmaba que Martinez ya canceló sus sesiones en julio para viajar a Francia , su país natal, y quería evitar las sesiones de  agosto porque “su hermano está de visita”. 

Según  TMZ, la actriz no  creyó en  sus excusas sobre viajes y visitas, ya que “las sesiones se realizan a través de Zoom y se pueden hacer desde cualquier lugar”. En su nueva petición al juez, también agregaba que había una fecha límite del 14 de junio para finalizar sus seis sesiones conjuntas, y que aún no las han culminado